Compras de última hora, preparar comidas para muchos invitados, regalos de reyes… La época navideña ha sido y será un contínuo ir y venir de encuentros, cenas de empresa e imprevistos de última hora que nos alejan de los buenos hábitos cotidianos.
Una vez pasadas estas fechas, llega el momento de parar, coger la famosa lista de ‘Propósitos de año nuevo, y ponernos a escribir aquello que sabemos que necesitamos mejorar, pero que no tuvimos todo el tiempo que quisimos el pasado año.
Entre esos propósitos, ¿has añadido ‘Cita en el dentista’?
Comienza el año preocupándote por tu salud
Si en Clínica Dental Euskalduna hiciéramos una encuesta a pie de calle sobre cuáles son los propósitos de año nuevo para el 2017, muchas personas nos responderían:
- Apuntarse al gimnasio
- Ponerse a dieta
- Aprender un nuevo idioma
- Y un largo etcétera
¿Conoces alguna persona que tenga como propósito de nuevo año acudir al dentista? ¿Revisar su ortodoncia? ¿Preguntar a su estomatólogo qué acciones de prevención de salud oral existen actualmente?
Durante las Navidades hemos ingerido, consciente o inconscientemente, alimentos típicos de las fiestas con un alto contenido en azúcar: polvorones, mazapanes, la fruta escarchada del roscón, turrón duro… ¡y muchos dulces más!
El azúcar refinado o el azúcar en grandes cantidades, además de no estar recomendado para nuestra salud en general, tampoco hace bien a la salud de nuestra boca. El azúcar tiene un alto poder cariogénico, es decir, altas probabilidades de que desarrollemos caries.
Siempre es recomendable tener presente visitar al dentista, pero más tras las fiestas navideñas.
El azúcar oculto en los alimentos
Sinazucar.org nos presenta en su Instagram fotografías de productos reales y conocidos con los azucarillos que le corresponden según su composición.
De una manera visual nos damos cuenta de que productos etiquetados como ‘light’, no son sinónimos de ‘sano’.
Desde Clínica Dental Euskalduna recomendamos leer detenidamente los ingredientes y composiciones de los alimentos que se compran para su ingesta. ¡Evitemos sorpresas con el dentista!
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