Su aceite posee cualidades antimicrobianas que contribuyen a mantener una buena salud bucodental
Agua de coco, leche de coco, batido de coco, flan de coco, cerdo al curry con coco… El coco es un alimento presente en múltiples recetas, sobre todo de repostería, y con variadas e interesantes cualidades nutritivas. Coco. ¿Sabes de dónde procede el nombre? Al parecer, de la ‘era de los descubrimientos’, entre el siglo XV y XVII. Los portugueses que lo trajeron a Europa lo bautizaron así porque su superficie marrón y con pelos les traía al pensamiento la cabeza del ‘Coco’, el personaje imaginario que todavía utilizan los padres para asustar a los niños cuando se portan mal.
Pues bien, no hace mucho una investigación realizada por el Instituto de Tecnología de Athlone (Irlanda), confirmó que esta fruta tropical es también muy beneficiosa para cuidar la salud bucodental. Y lo es por sus potentes propiedades antimicrobianas. El aceite de coco evita, al parecer, el crecimiento de la bacteria Streptococcus, una de las principales causantes de caries, y también ataca el hongo que provoca las úlceras orales, entre otras cualidades.
Enjuagarse la boca todos los días con una cucharada de aceite de coco durante unos minutos frenará, así, la aparición de las caries.
Lo que no se conseguirá con ello, ojo, es eliminar las que ya existan. Para esto habrá que visitar al dentista. Estas citas periódicas con los profesionales, conviene no olvidarlo, son muy importantes para comprobar que todo va bien. Y en todo caso, el aceite de coco será una acción complementaria al cepillado diario.
Hay que recordar que una salud bucodental óptima está íntimamente relacionada con el bienestar general de las personas.
Según otros defensores del aceite de coco, su uso podría ayudarte también a:
o Combatir el mal aliento
o Prevenir enfermedades de las encías y la boca
o Contribuir al blanqueamiento dental