La sensibilidad dental se produce cuando la dentina pierde su protección natural y queda al descubierto. Además, este problema puede dar pie a la aparición de ciertas patologías como la caries y las enfermedades de las encías.
Algunas de las causas de la hipersensibilidad dental son las siguientes:
- Cepillarse demasiado fuerte los dientes: cepillarse con demasiada frecuencia, con demasiada fuerza o con un cepillo de cerdas duras puede desgastar el esmalte del diente.
- Gingivitis (enfermedad de las encías): cuando el tejido de las encías se inflama y se debilita por la gingivitis es posible que la sensibilidad de las encías aumente.
- Bruxismo: Si sus dientes rechinan cuando duerme o si aprieta los dientes durante el día puede estar desgastando el esmalte y exponiendo la capa de dentina subyacente de su diente.
- Las comidas y bebidas con ácido (zumos de cítricos y refrescos carbónicos) provocan descalcificación y erosión del diente.
- Patologías estomacales como una úlcera, o psicológicas como la bulimia y la anorexia nerviosa, también juegan en contra de nuestra salud bucodental.
- También puede ocurrir que el problema venga dado por una anomalía anatómica, que ha hecho que la dentina quede al descubierto con una mayor exposición.
Para prevenirlo desde Clínica Dental Euskalduna te proponemos:
- Fijar unos hábitos dietéticos saludables: evitando el consumo en exceso de bebidas y alimentos ácidos.
- Corregir malos hábitos de cepillado: evitar el uso de palillos de madera y la excesiva presión sobre los dientes.
- Consultar los hábitos saludables de higiene oral: usar una correcta técnica de cepillado y una pasta de dientes no abrasiva.
Y si no te quedas tranquilo o el problema persiste, la mejor solución puede ser acudir al dentista para que te realicemos un diagnóstico adecuado y descartemos la presencia de otras patologías como caries y fracturas.