La detención de la cúpula de Vitaldent ha tenido una gran repercusión en prensa, causando una gran alarma social, reflejada en innumerables apariciones en espacios informativos. Ahora, lo que queda, es un intenso debate acerca de las clínicas dentales.
Antes fue Funnydent y antes Corporación Dermoestética… (Y antes, y antes…) ¿Cuál será la próxima? Ya existen rumores alrededor de otras franquicias/negocios que pudieran estar también a punto de saltar a los informativos. Y no por su excelente trato al paciente.
Si eres un gran profesional o eres el mejor en lo que haces, si eres un “Casillas” de la odontología, puede que seas muy solicitado y puedas hacer “contratos” millonarios. Pero hay muy pocos “Xavi´s de la odontología” o “Figo´s odontólogos”. La mayoría atiende a sus pacientes, sigue aprendiendo de los “máximos goleadores” del sector y, a cambio, consigue un sueldo digno que le permite vivir y que merezca la pena el esfuerzo realizado.
Por muchas franquicias que apadrinen su imagen, la de “Casillas”, “Xavi” o “Figo” para vender más, no les va a funcionar. Porque para jugar como ellos, hay que calzar sus botas, sudar las camisetas como ellos las sudan y dar el 100% en cada partido. ¡Su imagen en todo esto no es garantía de nada!
¿Cuándo nos vamos a dar cuenta de que no se puede gestionar la salud de nuestros pacientes como un negocio de enriquecimiento puro?
Tenemos un gran sistema de salud pública, que consume muchos recursos en impuestos. Como su propio nombre indica, es un servicio público: estatal, común, de todos y para todos, ¡no un negocio!
Los recursos necesarios para estar a la última y poder atender las necesidades de la población en esta materia de salud son de alto presupuesto. Es por esto que cuando tenemos problemas y tenemos que acudir a tratamientos que no están cubiertos por el sistema público de salud nos resultan “CAROS”.
Es en este momento cuando se usa un sistema totalmente privado para solucionar problemas de salud y realizar grandes tratamientos, estos tienen unos costes elevados para el paciente. Estos costes se justifican por todas las exigencias que conllevan: requerimientos administrativos y legislativos, formativos, instalaciones técnicas, proveedores, requerimientos tecnológicos, etc.
Es esto lo que pasa con las Clínicas Dentales, acometen tratamientos de salud muy importantes de una forma totalmente privada. Los pacientes, en ocasiones, intentan minimizar estos altos costes mediante aseguramientos, provisiones de fondos, etc. Pero, se financien como se financien, son tratamientos de alto presupuesto.
Estos tratamientos son aún de más presupuesto cuando precisan de alto equipamiento tecnológico y una técnica muy especializada o de vanguardia. Lo que ocurre en muchas ocasiones es que se espera a estar en tales situaciones de deterioro que requieren grandes tratamientos reconstructivos. No tan grandes en cuanto a presupuesto, sino grandes en cuanto a estudio: para poder llegar a conocer qué es lo que pasa y cuál es la mejor solución, lo que llamamos en el sector: Diagnóstico y planificación de tratamiento.
¿Te lo han ofrecido gratis? ¡Cuidado! Lo más probable es que se trate de un gancho, o incluso de una trampa.
Lo vistan como lo vistan, la salud bucal no puede gestionarse como un negocio de enriquecimiento rápido.
La única posibilidad para el paciente de que los tratamientos en odontología reparadora o restaurativa sean económicos pasa por dos opciones: O bien porque que sean subvencionadas o bien porque no se requiere llegar a tratamientos extremos.
¿Cómo se consigue esto? ¡Con una buena educación en prevención!: “El tratamiento más efectivo, más barato y el que mejor resultados da es aquel que no necesita hacerse”.
Y ojo, como se decía antes: “Que no te den duros a cuatro pesetas”